En esta ocasión os quiero presentar un blog imprescindible para los amantes de los dulces y/o de la cultura japonesa: Wagashi dagashi
Atziri y yo nos conocimos cuando estuve viviendo en Japón, ambas estábamos estudiando en Kansai Gaidai, una universidad cerca de Osaka. Nos hicimos amigas enseguida y me encantaba aprender cosas de su tierra (México) y probar las chuches con chile picante tan distintas a las de nuestro país que le mandaba su familia.
El caso es que la vida llevó a Atziri de vuelta a Japón donde trabaja y vive con su marido, el japonesito, como dice ella cariñosamente. Amante de los dulces y de la cultura japonesa, decidió empezar un blog en el que compartir sus descubrimientos en el país nipón.
Wagashi dagashi (和菓子・駄菓子) significa literalmente "dulces tradicionales japoneses - dulces baratos", un nombre que suena a trabalenguas pero que es muy fácil de pronunciar para culaquier hispanohablante, algo de lo que Atziri se preocupó cuando eligió el nombre de su blog.
En Japón los sabores de los dulces, los Kit Kat, por ejemplo, cambian a menudo o salen ediciones limitadas. La gente se cansa de las cosas rápido y siempre están innovando e incentivando el consumo. En Wagashi dagashi os enteraréis de lo último que aparece en el mercado o productos que están más de moda y que Atziri compra, prueba y opina.
Además, también visita lugares en Tokio u otros lugares de Japón cuando viaja en los que prueba las especialidades de cada barrio o ciudad, nos lo cuenta, y las valora. En estos casos suelen ser dulces típicos japoneses no industriales.
Y no sólo de dulces. A veces visita restaurantes o eventos en los que se sirven comidas especiales y originales, y también nos cuenta su experiencia, siempre, siempre con fotos hechas por ella, algo muy de agradecer cuando se trata de algo que no conoces.
Otro detalle que me gusta de Wagashi dagashi es que Atziri se documenta (y sabe mucho, tambien) y habla de las épocas históricas y sus costumbres en relación con algunos de los dulces o platos que prueba. Leyendo sus entradas, que suelen ser muy breves, aprendes una barbaridad. La verdad es que sólo por eso ya vale la pena seguirla.
¿Y a vosotros qué os parece? No me digáis que no os ha entrado hambre de repente.
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