Viaje a la vida

Hace poco tuvimos la gran suerte de que María Laguna, CM de Clínicas IVI, se pusiera en contacto con nosotras a través de este modesto blog para invitarnos a hacer un "Viaje a la vida". ¿Cómo puede alguien decir que no a algo así?

Cuando llegamos, María nos recibió a nosotras dos y a Carmen de Petit Tandem, un blog/webshop para gemelos. Me encantó que María en todo momento nos tratara con mucha cercanía y pudieras preguntarle culquier cosa, siempre tenía la respuesta que andabas buscando. ¡Muchas gracias!

Foto de la web de IVI Barcelona

Nuestra visita empezó charlando con el director de la clínica IVI Barcelona, el Dr. Ballesteros, que muy amablemente nos recibió y respondió a nuestras preguntas. En el caso de Carmen de embarazos gemelares y riesgos, algo que estoy segura de que ella misma contará en su blog. En nuestro caso, como ya no quedaba mucho tiempo, fui directa a hacer una crítica, constructiva, pero una crítica al fin y al cabo.

No es muy difícil imaginar que mi mujercita y yo queremos ser mamis algún día no demasiado lejano. Hace poco aprovechando una charla informativa gratuita que se hizo en la clínica, nos acercamos para tener un primer contacto, ver qué sentíamos, conocer la clínica en la que barajamos llevarlo a cabo... Aunque fue muy interesante y aprendimos mucho, la charla estaba claramente enfocada a los problemas de fertilidad y la FIV. Y sí, sabemos que es el principal motivo por el que uno acude a una clínica de este tipo pero también hay cada vez más mujeres que deciden ser madres solteras por elección o parejas que, como nosotras, no tenemos otra forma de conseguir algo que es tan importante y deseado como para las parejas heterosexuales.

Mi crítica fue dirigida justo a esos dos puntos, porque eso fuimos en aquella charla informativa, dos puntos por los que se pasa por encima, se nombran y ya está. Creo que deberían hacerse charlas más completas o charlas más específicas si no se quiere mezclar todo ya que aunque parezca lo mismo, no lo es. Generalmente las mujeres que acudimos por no tener pareja masculina, digámoslo así, no solemos tener problemas de fertilidad. Necesitamos un enfoque diferente y una atención que esté a la altura de las necesidades de la sociedad actual, le pese a quien le pese.

Por supuesto, el doctor Ballesteros me aseguró que transmitiría mi crítica a su equipo. Ahora habrá que esperar a ver los resultados.

Foto de la web de IVI Barcelona

Después de agradecerle al director que nos hubiera dedicado parte de su tiempo, pasamos a la segunda parte de la visita. María nos dejó con Mireia Florensa, supervisora del lavoratorio de FIV.

Nos habían advertido que nada de maquillaje ni perfumes y eso lo llevábamos hecho de casa así que lo primero que nos pidió es que nos cambiáramos de ropa, nos cubriéramos la cabeza y los pies y nos laváramos las manos. Estábamos a punto de entrar en el laboratorio donde nace la vida, parece una tontería dicho así, pero es de las cosas más emocionantes que he vivido.

Y así de guapa estaba yo antes de entrar:

La temperatura ambiente en el laboratorio es distinta, todas las mesas e instrumentos con los que se trabaja están a 37ºC, la temepratura corporal normal, para que lo que suceda lo haga acercándose lo más posible al vientre materno.

Mireia nos explicó la diferencia entre la congelación y la vitrificación. El método clásico, la congelación, permitía la formación de cristales que podían en algunos casos dañar el material congelado (óvulos, esperma, embriones). En cambio, gracias a la vitrificación, el proceso es tan rápido que esa posibilidad desaparece.

Para descongelar la temperatura también es la corporal.

Vimos los grandes tanques en los que a casi 180ºC bajo cero se conservan las esperanzas de muchas personas. Todo tiene un orden y un control muy precisos y cada movimiento que se hace en el laboratorio no se hace en solitario, siempre se hace con un testigo y los informes siempre van firmados por ambos.

¡Mireia explicándonos todo con infinita paciencia!

Pero lo mejor estaba por llegar. El Embryoscope, o la joya de la corona, es lo que yo he bautizado como incubadora supersónica que permite grabar el desarrollo de las células de un embrión porque una cámara los graba 24 horas. Esto posibilita que se puedan detectar ciertos fallos en el desarrollo que de la forma de incubación tradicional no podían verse.

Así es como se ve el desarrollo por días en la pantalla del ordenador que está conectado a esta maravilla de máquina:

Embrión antes de empezar a divirse

Primera división celular

Segunda división celular

Embrión tras múltiples divisiones

Cuando le das al play y lo ves moverse y las células dividirse en vivo y en directo es realmente alucinante. Nos dejó con la boca abierta ver nacer la vida tan cerca, ver lo que pasa en nuestro interior pero en el interior de un "útero tecnológico" que ayuda a tantas mujeres a conseguir su sueño de ser madres.

Salimos de allí con una mezcla de euforia y de esperanza tremendas. Con la seguridad de estar en buenas manos, de haber sentido la profesionalidad de todos los trabajadores de la clínica, su implicación, su sensibilidad, la privacidad de las pacientes y su esfuerzo por que este proceso sea lo más cómodo y agradable que se pueda para ellas. Y eso, junto a esas últimas imágenes del extraordinario Viaje a la vida es lo que nos llevamos de nuestra visita a la clínica IVI Barcelona.

Una vez más gracias a María, al doctor Ballesteros, al equipo de laboratorio que nos dejó acercarnos con cuidado y respeto a ver su trabajo, a la maravillosa Mireia (no tiene otro nombre) que nos dio todas las explicaciones que pedimos de forma que nosotras las pudiéramos entender y a IVI por habernos invitado.

No lo olvidaremos nunca.


Nota: No es un post patrocinado, lo escribo porque quiero y creo que vale la pena compartir con vosotros nuestra experiencia.